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Enfermedades Inflamatorias Intestinales: Claves para una gestión integral y saludable

¿Qué son exactamente las enfermedades inflamatorias intestinales (EII) y cuáles son los tipos más comunes?

Son afecciones caracterizadas por inflamación crónica del tracto gastrointestinal. Las dos EII más comunes son la Enfermedad de Crohn y la Colitis ulcerosa.

¿Cuáles son los síntomas característicos de las EII y cómo pueden diferenciarse de otras afecciones intestinales?

Colitis ulcerosa. Esta afección implica inflamación y llagas (úlceras) a lo largo del revestimiento del intestino grueso (colon) y el recto.

Enfermedad de Crohn. Este tipo de EII se caracteriza por la inflamación del revestimiento del tracto digestivo, que a menudo puede afectar las capas más profundas del intestino. La enfermedad de Crohn afecta con mayor frecuencia al intestino delgado. Sin embargo, también puede afectar al intestino grueso y, con menor frecuencia, al tracto gastrointestinal superior.

Tanto la colitis ulcerosa como la enfermedad de Crohn suelen caracterizarse por diarrea, sangrado rectal, dolor abdominal, fatiga y pérdida de peso.

Los síntomas varían según la gravedad de la inflamación y el lugar donde se produce. Pueden variar de leves a graves. Es probable que se tenga períodos de enfermedad activa seguidos de períodos de remisión.

Los signos y síntomas que son comunes tanto a la enfermedad de Crohn como a la colitis ulcerosa incluyen:

  • Diarrea Fatiga
  • Dolor abdominal y calambres
  • Sangre en tus heces
  • Apetito reducido
  • Pérdida de peso involuntaria

¿Cómo pueden los pacientes con enfermedades inflamatorias intestinales aprender a reconocer y gestionar los brotes de la enfermedad y cuáles son algunas estrategias efectivas para prevenir o reducir la frecuencia de los brotes?

Sabiendo bien identificar los síntomas, normalmente el paciente está tan familiarizado que sabe cuándo tiene el brote. En caso de tener brote, retirar aquellos alimentos que generen más síntomas, habría que personalizar según el paciente. Algunas estrategias para prevenir o reducir la frecuencia de los brotes:

  • Dieta: Llevar una dieta antiinflamatoria para prevenir brotes y mejorar sintomatología. Verduras/hortalizas, proteínas de calidad y grasas de calidad. Especialmente importantes los ácidos grasos Omega 3
  • Estrés: Una buena gestión del estrés es fundamental para evitar
  • Tabaco y alcohol: No fumar y evitar/ moderar el
  • Deporte y descanso

 

Al final, unos hábitos saludables.

Hablemos sobre la relación entre las EII y la dieta: ¿existen ciertos alimentos que pueden desencadenar los síntomas y cuáles son las recomendaciones dietéticas para los pacientes con EII?

Dependerá del paciente, pero es verdad, que los procesados, las harinas refinadas y los aceites vegetales refinados se deberían evitar. Además, el gluten, los lácteos de vaca y las legumbres también suelen generar problemas en estos pacientes.

Lo importante es personalizar la dieta, se debe pautar en función de: síntomas, localización de la enfermedad y complicaciones de la enfermedad.

Importante tratar al paciente en función de su situación clínica: brote o remisión

Revisar la lista de medicamentos, en caso de que esté tomando, para identificar los que afectan a la absorción.

Reposición de vitaminas liposolubles y vitamina b12 y uso de prebióticos, probióticos.

Dieta antiinflamatoria para prevenir brotes, mejorar sintomatología y mantener una buena salud digestiva.

Verduras/hortalizas, proteínas de calidad y grasas de calidad. Especialmente importantes los ácidos grasos Omega 3

¿Cuáles son algunos consejos prácticos que daría a los pacientes que viven con EII para ayudarles a manejar su enfermedad y mejorar su calidad de vida?

  • Dieta adecuada con todo lo comentado
  • Buena gestión del estrés
  • Deporte
  • Buen descanso
  • No fumar
  • Moderar o evitar el alcohol
  • Suplementación adecuada, si fuera necesario

 

¿Qué papel pueden desempeñar los complementos alimenticios en el manejo de las enfermedades inflamatorias intestinales y cuáles son algunos de los activos más recomendados para los pacientes con EII?

Juegan un papel importante para ayudar al paciente a evitar carencias, prevenir recaídas y mejorar su salud.

Habría que personalizar y valorar en qué momento se pautan, pero importantes en todos los pacientes:

  • Omega 3
  • Glutamina
  • Melena de León
  • Espino amarillo
  • Probióticos
  • Vitamina D

 

Desde Vitae queremos agradecer a Verónica Sobrino por esta entrevista y todos los conocimientos que nos ha proporcionado.

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