Los aceites vegetales penetran fácilmente en la piel, nutren, protegen y reconstituyen la capa córnea. Iluminan la piel dejándola fina y flexible, gracias a su acción suavizante, plastificante, tonificante y regeneradora.
No causan reacciones alérgicas, ya que tienen una compatibilidad total con las membranas de las células. Los aceites vegetales también tienen vitaminas, lecitina, minerales y ácidos grasos insaturados.
Muchos aceites esenciales, no se pueden utilizar puros en la piel, ya que son dermoagresivos. A fin de ser utilizados de forma segura, estos deben ser diluidos en aceite vegetal. Cuando agregamos aceites esenciales a aceites vegetales, la absorción en la piel se facilita, llegando incluso al torrente sanguíneo, produciendo efectos terapéuticos tales como relajación, curación, etc.
Algunos aceites vegetales esenciales
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Aceite de Argán.
Llamado “el oro de marruecos”, este aceite vegetal se extrae de las semillas del árbol del mismo nombre. Es un aceite rico en ácidos grasos esenciales insaturados (80%). Contiene 35 % de ácido linoleico (Omega 6), ácido oleico 45 %, (Omega 9) Vitamina E (62 mg / 100 mg), escualeno, poli fenoles, carotenoides y esteroles.
El aceite de argán es capaz de nutrir y reestructurar el cabello seco y quebradizo, lo que reduce las puntas abiertas y protege del daño térmico. Igualmente, mantiene el color del cabello teñido por más tiempo.
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Aceite de Barú.
El aceite de Barú, se utiliza tradicionalmente de varias maneras. Su almendra es apreciada como alimento y es rica en aceite insaturado, proteínas, calcio y fósforo. Este aceite vegetal es un gran hidratante para la piel, previniendo la aparición de estrías. Debido a su fácil absorción es indicado para masajes, y para proteger la piel del efecto negativo de la luz solar.
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Aceite de Damasco.
El Damasco, es un árbol que alcanza hasta 12 metros de atura y que produce una fruta similar al melocotón. El aceite, que se extrae de su almendra, es rico en vitamina A, esencial para la vitalidad y la belleza dela piel. Este aceite vegetal, es utilizado por las mujeres tibetanas, para protegerse de los efectos dañinos de la radiación solar a grandes altitudes.
Pero no solo los aceites vegetales pueden ayudarnos a hidratar, nutrir y rejuvenecer la piel. Para conocer nuestra recomendación final, solo basta que sigas este enlace.
