¿Qué es el síndrome de ojo seco?
Definición y síntomas comunes
El síndrome de ojo seco se produce cuando la superficie ocular no se mantiene lo suficientemente lubricada. Esto puede deberse a una producción insuficiente de lágrimas o a que estas se evaporan demasiado rápido. ¿El resultado? Molestias como picor, enrojecimiento, sensación de arenilla, escozor o incluso visión borrosa.
¿A quién afecta y por qué es cada vez más frecuente?
Aunque puede afectar a cualquier persona, el ojo seco es más común a medida que envejecemos. Cada vez más personas jóvenes también lo padecen debido al estilo de vida moderno, especialmente por el uso intensivo de pantallas. Lo que antes era una molestia puntual, hoy se ha convertido en un problema crónico para muchas personas.
La vista es el sentido más importante que tenemos, ya que hasta el 80% de lo que percibimos es a través de los ojos. Por eso, debemos tener una buena salud ocular y cuidar de ella. El ojo seco o sequedad de la superficie ocular es un problema oftalmológico muy frecuente que puede ser favorecido o provocado por diversos factores (autoimmunes , ambientales, hormonales, tóxicos, etc.) y afecta a 5 millones de personas en España, representando un 11% de la población total, los cuales solo el 34% recibe tratamiento.
Cualquier persona puede desarrollar este síndrome, pero si es cierto que es más probable que lo tengas si:
- Tienes más de 50 años
- Eres mujer
- Usas lentes de contacto
- No consumes suficiente Vitamina A (zanahorias, brócoli, hígado) o ácidos grasos omega-3 (pescado, nueves, aceites vegetales)
- Tienes ciertas afecciones auto inmunológicas, como el lupus o el síndrome de Sjögren
Factores de riesgo
- Uso prolongado de ordenadores, móviles y tabletas
- Ambientes secos o con aire acondicionado
- Envejecimiento natural
- Cambios hormonales, como los de la menopausia
- Uso de lentes de contacto
- Cirugías oculares y ciertos medicamentos
Causas del ojo seco: ¿por qué se altera la lubricación ocular?
Disminución de la producción lagrimal
Con la edad o debido a ciertos factores externos, nuestras glándulas lagrimales producen menos lágrimas.
Aumento de la evaporación de la lágrima
Una película lagrimal inestable se evapora con facilidad, sobre todo si la capa lipídica (grasosa) está comprometida.
Inflamación crónica y alteración de las glándulas de Meibomio
Estas glándulas, situadas en los párpados, secretan los lípidos que protegen la lágrima. Cuando no funcionan correctamente, se agrava la sequedad ocular.
Consecuencias del ojo seco en la calidad de vida
El ojo seco va mucho más allá de una molestia leve. Las personas que lo padecen experimentan escozor constante, picor, sensación de arenilla o cuerpo extraño, sensibilidad a la luz y visión fluctuante, sobre todo al final del día o tras muchas horas frente a una pantalla. Estas molestias influyen directamente en actividades cotidianas como leer, conducir, trabajar o incluso dormir.
Además, la necesidad constante de usar colirios o de parpadear con frecuencia para aliviar el malestar puede generar ansiedad y una sensación de frustración. Muchas personas experimentan fatiga visual, dolores de cabeza y disminución de la productividad laboral, especialmente si trabajan con pantallas. En casos más severos, el ojo seco puede llegar a afectar el estado de ánimo y la calidad del descanso nocturno. Por todo ello, no debe subestimarse su impacto: cuidar la salud ocular también es cuidar el bienestar general.
Tratamientos habituales: lágrimas artificiales y más allá
Los tratamientos más comunes para el ojo seco suelen comenzar con lágrimas artificiales. Estos colirios proporcionan una hidratación rápida y alivian temporalmente los síntomas. Sin embargo, no siempre son suficientes, especialmente en los casos crónicos o cuando la causa principal no es la falta de lágrima, sino su mala calidad o evaporación acelerada.
Limitaciones de los colirios
Las lágrimas artificiales no solucionan la raíz del problema: solo humedecen de forma puntual, sin actuar sobre la calidad de la lágrima ni sobre las glándulas que la producen. Además, su uso frecuente puede resultar incómodo o generar dependencia, y algunos colirios contienen conservantes que irritan aún más los ojos sensibles.
Importancia de un abordaje integral: externo + interno
Un enfoque más completo debe contemplar tanto el alivio externo como el tratamiento desde el interior. Esto implica cuidar la salud de las mucosas a través de la nutrición, incorporar ácidos grasos beneficiosos en la dieta y reducir la inflamación ocular desde dentro. Suplementos como OlioVita representan esta nueva forma de abordar el problema: actuar desde dentro para lograr una mejora más profunda y duradera.
La hidratación ocular desde dentro: el papel del omega 7
¿Qué es el omega 7?
El omega 7, también conocido como ácido palmitoleico, es un ácido graso que se encuentra de forma natural en el espino amarillo y en menor medida en el aceite de macadamia. Este nutriente es esencial para mantener la integridad y lubricación de las mucosas del cuerpo, incluyendo los ojos.
Espino amarillo: una fuente natural única
El aceite de espino amarillo se obtiene de la pulpa y las semillas del fruto y contiene una combinación excepcional de omega 7, omega 3, 6 y 9, junto a antioxidantes como la vitamina E, carotenoides y flavonoides. Esta sinergia lo convierte en una fuente única para nutrir y regenerar tejidos.
Evidencia científica en el tratamiento del ojo seco con omega 7
Diversos estudios clínicos han demostrado que la suplementación con aceite de espino amarillo mejora la calidad de la película lagrimal y reduce los síntomas del ojo seco. Se ha observado una disminución significativa de la evaporación de la lágrima, una mayor estabilidad ocular y una mejora en la sensación de confort después de varias semanas de uso. Además, su acción antiinflamatoria y antioxidante contribuye a calmar la irritación ocular y restaurar el equilibrio de las glándulas de Meibomio. Esta evidencia respalda el uso del omega 7 como parte de un tratamiento integral y eficaz frente al ojo seco.
OlioVita como aliado natural frente al ojo seco
¿Qué es OlioVita?
OlioVita es un complemento alimenticio formulado a base de aceite puro de espino amarillo, combinado con antioxidantes como la vitamina E. Una solución 100% natural pensada para nutrir y proteger las mucosas desde dentro.
Composición eficaz
Su fórmula única incluye:
- Omega 7 (ácido palmitoleico)
- Ácidos grasos esenciales omega 3 y 6
- Antioxidantes naturales
- Vitamina E
¿Cómo actúa sobre los ojos?
Gracias a su acción desde el interior, OlioVita ayuda a:
- Mejorar la calidad de la lágrima
- Reducir la inflamación de las glándulas de Meibomio
- Aumentar la hidratación de la mucosa ocular
Resultados percibidos
Muchas personas que han tomado OlioVita de forma continuada reportan una notable mejoría en la sensación de sequedad, menos necesidad de colirios y mayor confort visual en su día a día.
¿Cuándo y cómo tomar OlioVita?
Recomendaciones de uso
Generalmente, se recomienda tomar 4 cápsulas al día durante los dos primeros meses y el tercer mes bajar dosis a 2 cápsulas diarias, preferiblemente con una comida. Consulta siempre con tu profesional de salud para personalizar la dosis.
Duración de la suplementación
Aunque algunos efectos se notan tras pocas semanas, lo ideal es mantener el tratamiento al menos durante 2-3 meses para obtener resultados estables y duraderos.
Hábitos complementarios
- Descansar la vista cada 20 minutos frente a pantallas
- Parpadear conscientemente
- Usar humidificadores en ambientes secos
- Mantener una buena hidratación general
Conclusión
El síndrome de ojo seco es mucho más que una molestia ocular: es una afección que impacta en la calidad de vida, el bienestar emocional y la productividad diaria. Para tratarlo de forma eficaz, es necesario adoptar un enfoque completo que no se limite a soluciones externas. La nutrición juega un papel clave en este proceso. Cuidar desde dentro la salud de nuestras mucosas, reforzar la barrera lipídica de la lágrima y reducir la inflamación son pasos fundamentales para recuperar el confort ocular. En este contexto, OlioVita se presenta como un aliado natural y eficaz, capaz de ofrecer hidratación y protección desde el interior gracias a su contenido en omega 7 y antioxidantes. Apostar por este tipo de soluciones es apostar por una visión más saludable y una vida más cómoda y plena.